De Hornillos del Camino a Fromista:

El camino de ahora en adelante es árido pero a la vez rebosante de vida. Las rapaces vuelan desde muy temprano buscando un conejo o una rata (o un peregrino) para desayunar. A pesar de ser otoño hay insectos por doquier y la vegetación a lo largo del camino es abundante. El campo está recién segado y el viento chilla como si estuviese pariendo.

Amanecer en la Meseta

Arroyo de San Bol

Poco antes de llegar a Castrojeriz tienes que cruzar por el convento de San Antón; ahora que está en ruinas se ha construido una carretera entre sus arcadas. Un hombre muy desagradable nos advirtió que no podíamos entrar dentro, contradiciendose con todas las guías y veteranos del camino. Es espectacular como nos excusamos con mentiras cuando algo no nos conviene y lo integrado que esta actitud está en nuestra sociedad.

Convento de San Antón

Castrojeriz

En Catrojeriz redescubrí a Mahou, un ermitaño italiano con barba y que no había envejecido ni una arruga desde 2009. Su filosofía se resume en frases lapidantes "El agua túrbia déjala reposar, se volverá clara", "Un buen silencio no fue nunca escrito","El milagro no es volar por el aire o pasar sobre las aguas, sino caminar sobre la tierra","Cuando no sepas donde vas, mira de donde vienes","El hombre ideal es aquel que en el momento más intenso de la actividad sabe encontrar el silencio y la soledad del desierto. Este hombre ha conseguido ser patrón de si mismo","Para los que aman el tiempo es eternidad",""Quien no comprende una mirada tampoco comprenderá una larga explicación""La verdad se expresa con la mayor simplicidad".

En Catrojeriz se encuentran varios edificios notables del medievo. Sorprende que en el restaurante principal ondee la bandera de Brasil, podría parecer un reclamo pero dentro está inmortalizado en fotografías de los 90 un Pablo Coelho delgado y sonriendo posando en la puerta del restaurante.

Al día siguiente tocaba ir hasta Fromista, sin nada más espectacular que el puente sobre el Pisuerga. La rutina de la Meseta empezaba a actuar sobre mi ser.

Iglesia de Fromista desde el albergue