Hace tiempo tuve el placer de conocer al presidente de una de las ONG más notables de España, lo identifiqué en un tren a las afueras de Barcelona y acabamos hablando sobre el conflicto armado del coltán. Cosa de un año atrás se me mostraron dos documentales, uno sobre el uso de África como contenedor de nuestros desechos tecnológicos y el otro sobre la intención de los fabricantes en que sus productos se rompan al cabo de cierto tiempo.
Este artículo pretende ser un enlace entre estos tres temas que tanto me han dado que pensar: la problemática en la producción de la materia prima, la intencionalidad de que los productos no duren y finalmente donde van a parar después de su vida útil.
Según las Naciones Unidas, el Ejército Patriótico Ruandés ha montado una estructura para supervisar la actividad minera en Congo y facilitar los contactos con los empresarios y clientes occidentales. Traslada el mineral a Ruanda donde es procesado antes de ser exportado. Los destinatarios finales son EE. UU., Alemania, Países Bajos, Bélgica yKazajistán. Esta guerra, directamente relacionada con la explotación de este mineral, arroja un saldo de más de 5,5 millones de víctimas, lo que supone el mayor número de muertes desde la Segunda Guerra Mundial.
Ruanda y Uganda, han sido acusados en varios informes internacionales, del expolio y tráfico de estas riquezas minerales del Congo. Siendo varios países occidentales los principales beneficiarios, la ayuda económica y militar continúa durante el conflicto. Se firmaron planes de apoyo y cooperación entre Estados Unidos y estos dos países, los cuales además de enriquecerse con el tráfico del mineral, vieron cómo parte de sus deudas externas fueron canceladas y se los consideró como modelos de desarrollo económico de la región. Entre las empresas más importantes con intereses en la región, ha sido mencionada la American Mineral Fields, en la que George H. W. Bush, padre del expresidente norteamericano George W. Bush, tiene notables intereses. Durante los años transcurridos hasta hoy han disputado la guerra dos bandos: de un lado Ruanda, Uganda y Burundi, apoyados por EEUU y los créditos del FMI y el Banco Mundial, y del otro lado Angola, Namibia, Zimbabue, Chad y las milicias hutu y Mai Mai.
La explotación del coltan, especialmente en Congo, ha ocasionado diversas polémicas sobre las posibles consecuencias a nivel social y ambiental. La explotación de este recurso ha alimentado conflictos armados entre facciones locales, apoyadas, en algunos casos, por gobiernos extranjeros como el de Uganda. Esto plantea un dilema moral similar al de la comercialización de diamantes de guerra. Otras preocupaciones derivadas de la extracción del coltán pasan por la explotación laboral de los trabajadores que participan en la misma o la destrucción de ecosistemas, pues los principales yacimientos coinciden con los hábitat de gorilas en peligro de extinción.
La obsolecencia programada: comprar, tirar, comprar
La otra cara del derroche
Todos sabemos que la materia no se destruye, sinó que se transforma, y si no se puede transformar porque huele mal, entonces se transporta. ¿Donde se transporta? pues donde la quieran, pero nadie la quiere obviamente, porque sino no se huviera transportado. Se transportó porque un día dejó de ser útil, lo que implica que antes lo fue y por tanto alguien la compró y finalmente como la compró alguien la tuvo que hacer. Así se cierra el ciclo.
Se transporta a Ghana principalmente, el país que se está convirtiendo en el recolector de los residuos digitales generados en el primer mundo. Pero esto está prohibido por organizaciones internacionales, todo está escondido en un pequeño eufemismo: recortar la brecha digital entre los países pobres y ricos.
Pronto Ghana se quedará pequeña y la recolección se extenderá hacia Senegal y otros países colindantes, después un continente entero y los oceanos, todo es cuestión de tiempo y no se preocupen que si usted es joven de bien seguro que lo verá.
Por si quieren saber más: aquí.
Este artículo pretende ser un enlace entre estos tres temas que tanto me han dado que pensar: la problemática en la producción de la materia prima, la intencionalidad de que los productos no duren y finalmente donde van a parar después de su vida útil.
Desconozco la verdad de los hechos puesto que las fuentes pueden estar perfectamente manipuladas, ni he estado en las minas en Congo, ni en los vertederos de Ghana, pero como usuario si que puedo decir: todo dura menos que antes.
La materia prima: el conflicto del Coltán
Saber que tus aparatos han sido producidos en India, Taiwan o China es solo la punta del iceberg. Pero no conocemos para nada de que están hechos. La materia prima que sostiene esta industria es el "coltán" y el precio del producto final depende de ello. El coltán se extrae de la columbita y la tantalita que se encuentra mayoritariamente en la República Democrática del Congo, aunque se transforma principalmente en Alemania.
Entorno a su extracción se ha creado un conflicto armado que ya lleva 5 millones de muertos (casi como judíos bajo el nazismo), además de provocar un fuerte impacto ambiental.
Finalmente, según el artículo de wikipedia que aparece a continuación las grandes corporaciones tecnológicas están empezando a tomar consciencia de la gravedad del conflicto.
Entorno a su extracción se ha creado un conflicto armado que ya lleva 5 millones de muertos (casi como judíos bajo el nazismo), además de provocar un fuerte impacto ambiental.
Finalmente, según el artículo de wikipedia que aparece a continuación las grandes corporaciones tecnológicas están empezando a tomar consciencia de la gravedad del conflicto.
Extracto del artículo de wikipedia sobre el Coltán:
Según informes de agencias internacionales de prensa, la exportación de coltán ha ayudado a financiar a varios bandos de la Segunda Guerra del Congo, un conflicto que ha resultado con un balance aproximado de más de 5 millones de muertos, como también ha servido a algunas guerrillas colombianas donde existe el mismo problema. Ruanda y Uganda están actualmente exportando coltan robado del Congo a occidente (principalmente a los Estados Unidos).
La República Democrática del Congo posee el 81% de las reservas mundiales estimadas de coltán. Como este mineral está considerado como un recurso no renovable altamente estratégico, existe una guerra en el Congo desde 1998.
La República Democrática del Congo posee el 81% de las reservas mundiales estimadas de coltán. Como este mineral está considerado como un recurso no renovable altamente estratégico, existe una guerra en el Congo desde 1998.
Según las Naciones Unidas, el Ejército Patriótico Ruandés ha montado una estructura para supervisar la actividad minera en Congo y facilitar los contactos con los empresarios y clientes occidentales. Traslada el mineral a Ruanda donde es procesado antes de ser exportado. Los destinatarios finales son EE. UU., Alemania, Países Bajos, Bélgica yKazajistán. Esta guerra, directamente relacionada con la explotación de este mineral, arroja un saldo de más de 5,5 millones de víctimas, lo que supone el mayor número de muertes desde la Segunda Guerra Mundial.
Ruanda y Uganda, han sido acusados en varios informes internacionales, del expolio y tráfico de estas riquezas minerales del Congo. Siendo varios países occidentales los principales beneficiarios, la ayuda económica y militar continúa durante el conflicto. Se firmaron planes de apoyo y cooperación entre Estados Unidos y estos dos países, los cuales además de enriquecerse con el tráfico del mineral, vieron cómo parte de sus deudas externas fueron canceladas y se los consideró como modelos de desarrollo económico de la región. Entre las empresas más importantes con intereses en la región, ha sido mencionada la American Mineral Fields, en la que George H. W. Bush, padre del expresidente norteamericano George W. Bush, tiene notables intereses. Durante los años transcurridos hasta hoy han disputado la guerra dos bandos: de un lado Ruanda, Uganda y Burundi, apoyados por EEUU y los créditos del FMI y el Banco Mundial, y del otro lado Angola, Namibia, Zimbabue, Chad y las milicias hutu y Mai Mai.
La explotación del coltan, especialmente en Congo, ha ocasionado diversas polémicas sobre las posibles consecuencias a nivel social y ambiental. La explotación de este recurso ha alimentado conflictos armados entre facciones locales, apoyadas, en algunos casos, por gobiernos extranjeros como el de Uganda. Esto plantea un dilema moral similar al de la comercialización de diamantes de guerra. Otras preocupaciones derivadas de la extracción del coltán pasan por la explotación laboral de los trabajadores que participan en la misma o la destrucción de ecosistemas, pues los principales yacimientos coinciden con los hábitat de gorilas en peligro de extinción.
El contrabando de coltan también se ha identificado como la mayor fuente de ingresos para la ocupación militar del Congo. Debido a la creciente presión pública, algunos fabricantes de aparatos electrónicos han decidido dejar de lado esta zona del mundo como fuente de coltan, y dirigirse a otras fuentes.
Sin salir de África, también cabe mencionar el papel del Grupo Live, una empresa proveedora de coltan, que asegura que la demanda del mineral en el extranjero es tan grande que no pueden satisfacerla plenamente. Lo que indica que no existe ningún boicot por parte de Occidente a este tipo de negocios.
Uno de los mejores clientes de Live es la sociedad belga TRAXYS, especializada en minerales raros y nombrada en un informe de la ONU de 2003,que la señalaba como una de las entidades dedicadas a la financiación de conflictos en el Congo. Esta sociedad asegura que mantiene sus propias medidas de control sobre la mercancía, materializada en el envío de equipos independientes que se encargan de verificar la versión de los proveedores, y afirma que el coltan que les llega no proviene de las zonas en guerra.
Empresas como TRAXIS exportan coltan al mundo entero y especialmente a China, donde se produce la mitad de teléfonos móviles que circulan anualmente por el planeta. Las grandes marcas internacionales (Apple,Samsung,Motorola, Nokia..., todas las compañías) subcontratan allí una parte de su producción, a sabiendas que el mineral viene de África.
Ante esta situación, las empresas de telefonía móvil han multiplicado sus campañas de comunicación, donde exigen a sus proveedores que no compren coltan en el Congo. El propio presidente de Nokia, preguntado a este respecto, respondió que siempre han sido cuidadosos con el medio ambiente.
Un trabajador congoleño normal gana alrededor de 10$ mensuales. Un trabajador que trabaja en las minas extrayendo coltan, gana entre 10$ y 50$ semanales.12 La tonelada de coltan se cotiza en el mercado a 400.000$. El método de extracción es arcaico, es muy parecido al método con el que extraían oro antiguamente en EEUU. Trabajan en condiciones de semiesclavitud. Un buen trabajador puede sacar un kilo de coltan diario. Además de coltan aparecen otros minerales radiactivos con similares características, elementos como el uranio, torio y radio entre otros. Debido a la exposición de los trabajadores ante estos minerales, ha habido una gran cantidad de enfermos por radiación.
La obsolecencia programada: comprar, tirar, comprar
Si alguien les afirmara que una bombilla lleva más de cien años encendida ininterrumpidamente y que además lo pueden comprovar en directo aquí, quizás sientan un gran enojo porque sus muebles suecos o su laptop no es capaz de aguantar cien años.
En Livermore, CA existe una bombilla que ha estado encendida initerrumpídamente desde 1901, en cambio, mi ordenador ACER ASPIRE 5542, comprado hace 2 veranos, se apaga si permanece encendido porque el ventilador se ha llenado de pelusa y no existe ninguna forma de abrirlo y según tres tiendas de informática, debo comprarme uno nuevo.
El reportaje "Comprar, Tirar, Comprar" (aquí), curiosamente promovido con dinero público y desde una tele autonómica (muy a pesar del govierno central de España que prefiere el modelo de televisión repleto de analfabetos o tarotistas noctámbulos), nos desvela un concepto muy poco popular pero altamente creíble: la obsolecencia programada, el hecho de que todo se rompa intencionadamente al cabo de un tiempo determinado o el deseo de consumir algo un poco más nuevo un poco antes de lo necesario.
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| Imagen tomada el día que se publico este artículo desde la webcamp de Livermore |
La bombilla fue el primer invento en caer. Existen documentos historicos que afirman que desde principios del siglo XX existe un cartel de empresas que fijan la duración de la vida de las bombillas en 1000h. También lo fueron las fibras sintéticas, al acortarle la vida intencionadamente. En la gran depresión algun empresario creyó que la obsolescéncia servia para salir de la crisis y en los años 50 se cambió el enfoque: ya no se trataba de que se estropearan los objetos que el usuario había comprado, sinó que este quisiera uno nuevo un poco mejor antes de lo necesario.
La Obsolecencia Programada, junto al Crédito y la Publicidad son los tres pilares de la sociedad de consumo, pero cuando este concepto fue diseñado el mundo tenía aún muchos recursos para la población que había. Como dijo Mahatma Gandhi: "El mundo es suficientemente grande para satisfacer las necesidades de
todos, pero siempre sera demasiado pequeño para satisfacer la avaricia
de algunos."
La otra cara del derroche
Todos sabemos que la materia no se destruye, sinó que se transforma, y si no se puede transformar porque huele mal, entonces se transporta. ¿Donde se transporta? pues donde la quieran, pero nadie la quiere obviamente, porque sino no se huviera transportado. Se transportó porque un día dejó de ser útil, lo que implica que antes lo fue y por tanto alguien la compró y finalmente como la compró alguien la tuvo que hacer. Así se cierra el ciclo.
Se transporta a Ghana principalmente, el país que se está convirtiendo en el recolector de los residuos digitales generados en el primer mundo. Pero esto está prohibido por organizaciones internacionales, todo está escondido en un pequeño eufemismo: recortar la brecha digital entre los países pobres y ricos.
Pronto Ghana se quedará pequeña y la recolección se extenderá hacia Senegal y otros países colindantes, después un continente entero y los oceanos, todo es cuestión de tiempo y no se preocupen que si usted es joven de bien seguro que lo verá.
Por si quieren saber más: aquí.
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